¨Me da la impresión de que tengo que regular y limitar mi vida para que mi madre no alucine, para que ella esté bien y para que yo, al fin, deje de existir. ¿Qué sería eso sino una anorexia anímica? Adelgazar psíquicamente hasta que no quede nada de ti misma, para que tu madre se calme y no tenga miedo¨
Los actuales investigadores del cerebro saben desde hace unos cuantos años que la carencia de un lazo apropiado y seguro con la madre desde los primeros meses de vida hasta los tres años deja huellas decisivas en el cerebro y ocasiona serios trastornos. Alice Miller
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