Un adulto se harta de su introyecto (en relación a los padres crueles interiorizados) y piensa que es dañino. Desea liberarse pero halla muy difícil hacerlo. Es posible que no sea consciente de que una parte se su personalidad que aún es un niño se aferra a comportamientos infantiles e ignora las consecuencias de tales actitudes.(el deseo de ser amado es muy fuerte) Las expectativas infantiles pueden estar escondidas en el inconsciente y sólo ser detectadas por inferencia, por ejemplo en el contexto de nuestros sueños.(aparecen los padres muchas veces en los sueños de manera cálida, amistosa, amorosa,nos brindan lo que no nos dieron, sueños ideales, pero el contexto del sueño suele mostrar la verdad colándose entre la mentira)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario